Enjoy For Free Acceso No Autorizado Devised By Belén Gopegui Available As Manuscript
político e informático Para mi gusto, sinceramente creo que no, El libro narra una historia, en principio ficticia, en la que son fácilmente reconocibles la exvicepresidenta del gobierno María Teresa Fernández de la Vega en el papel de "buena" y, el ahora también exministro del interior, Alfredo Pérez Rubalcaba en el papel de "menos bueno".
Tras la lectura del libro me queda la sensación de que la historia de los hackers no es más que una excusa para que la autora exponga sus reflexiones personales y políticas sobre los cambios sucedidos en el Partido Socialista en los últimoo incluso ya casiaños con la "derechización" del partido.
Desconozco, y he de reconocer que tampoco me importa mucho, si tras la defenestración de Teresa Fernández de la Vega de su puesto en el gobierno podía o no estar el asunto de las Cajas de Ahorro como se plantea en el libro.
En cualquier caso, creo que este tema es también otra excusa de la autora puesto que hasta que no ha transcurrido más de la mitad de la novela no aparece el asunto.
Como parte negativa del libro, aunque es nada más que una apreciación personal, señalaría que si nos planteamos la lectura como una historia de suspense, pese al poco tiempo transcurrido desde su publicación, tengo la impresión de que la historia está caducada, y según vaya pasando el tiempo aún más.
Hasta ahora no había leído nada de esta autora, a la que daré otra oportunidad y para lo cual acepto recomendaciones, y es que en este caso, con un libro correctamente escrito, creo que ha pesado bastante más una ideología política concreta y la defensa de unas ideas que la historia en sí misma.
Acceso no autorizado narra la historia de la lucha que la vicepresidenta de un gobierno del PSOE sigue adelante con el fin de que dicho partido no se desvíe de su ideología, pese a saber que tiene muy pocas posibilidades de poder conseguirlo.
A través de su ordenador y en forma de una flecha, se presenta el relato de un abogado que penetra sin autorización en el ordenador de Julia, la vicepresidenta, para conseguir así ayudar a un amigo suyo.
Sin embargo, la relación entre ambos evoluciona en una necesidad mutua de ayuda, de comprensión pero, principalmente, de compañía en un mundo en el que luchar para salirse del camino está castigado.
Los personajes de esta obra se podrían reunir en dos categorías: aquellos que aceptan las cosas como están y se resignan a actuar siguiendo el camino ya propuesto el presidente, el ministro de Interior, el Irlandés, y aquellos que intentan salirse del camino y cambiar las cosas, sin rendirse aunque sepan que no hay posibilidad la vicepresidenta Julia, algunos amigos suyos, políticos y expolíticos, el abogado y el chico en problemas, Crisma.
Los sucesos y los personajes descritos en esta novela nos recuerdan irremediablemente a esos últimos momentos del PSOE, decaído por “la crisis” o quizá más bien por la inercia y la cobardía, en los que el partido empezó a dar los primeros pasos hacia la derecha.
En esta época y desde hace bastante tiempo, la ideología deja de tener la magnitud que antes tenía para dar paso a la supremacía de los bancos, de las empresas y, en definitiva, de lo privado, muy por encima del gobierno de un país, sin importar su origen, y a años luz de las necesidades sociales de los individuos de a pie.
Ees un gran libro, con la gran calidad literaria a la que Gopegui nos tiene acostumbrados, que quizá se queda corto comparado con otras obras suyas que la superan irremediablemente: La escala de los mapas, La conquista del aire: los saltos de tiempo y persona en la narración sin seguir ningún tipo de coherencia resultan confusos y puede romper la fluidez del relato los diálogos, continuamente filosóficos y políticos, entre los personajes no producen credibilidad sino que, más bien, parecen pertenecer a la misma vozposiblemente, de la autora y la historia de la conspiración va perdiendo peso conforme el relato avanza.
Sin embargo, este último punto parece explicarse cuando la vicepresidente dice en su comparecencia que soñamos con la conspiración porque implicaría la existencia de un orden, y eso nos calma.
Quizá no era necesario elaborar el suceso de la privatización de las cajas o las otras tensiones mencionadas al principio de la novela.
Quizá lo único que tiene peso es que en la política las cosas simplemente pasan, y suele ser por pasividad.
Reseña completa: sitelink wordpress. c Non é a mellor de Gopegui
Pero mis dieses a pór de malo a la PSOE Obra menor.
"Bueno, si no, no te preocupes, es un portátil viejo que compré de segunda mano,
Lo sé dijo el abogado,
Lo habían comprado juntos, pero no quiso decírselo, solo habría servido para que ella se sintiera mal durante unos segundos por haberlo olvidado.
Él ya se había acostumbrado a esa desproporción en la memoria, había una vida de horas y semanas pasadas con Amaya de la cual él podía evocar olores, prendas, gestos, y que en cambio para ella se había esfumado: el brazo de Amaya alzado al guardar una taza en un estante, su cara en ese momento se vuelve hacia él mientras sonríe.
Podía reconstruirlo fotograma a fotograma, Recordaba las historias que ella le contó, los bares que habían compartido, y sabía que todo eso estaba sobrescrito en el cerebro de Amaya, con imágenes de otras personas y otras historias donde él no aparecía".
Apasionante historia sobre la realidad política, mezclada con una historia de hackers y una pregunta abierta sobre hasta dónde somos vulnerables con las tecnologías.
Está bien, pero mirado en perspectiva de autora, Gopegui tiene libros mejores, Es un libro High Concept,
Y si a Maria Teresa Fernandez de la Vega se le hubiese metido un hacker en el ordenador
Vale, la premisa es interesante, toma un adelanto y me lo escribes.
SPOILERS
Oye Belen como va el libro
Bien, Bien, mira he metido un par de conspiraciones y un ministro de interior malísimo y luego el hacker quiere ayudar a un muchacho y luego resulta que las tramas estan liadas entre si y.
. .
Vas acabando
Si pero mira, he pensado que igual si hacemos una especie de amor platónico entre la vice y el hacker.
. .
Como vamos
Genial! les he dado mucha profundidad a base de citas de grandes literatos y.
. .
!Acabas de una vez!
Pues Fale, total no sabía por donde tirar, Hala a él lo mato y a ella que la echen,
Y la conspiración
Bah tampoco era para tanto, Hay que reconocerle a Gopegui el mérito por hablar de la actualidad política y social sin alegorías y que utilice los resortes del thriller no sólo como resortes sino para profundizar en el mundo en el que estamos.
La ambición es muy grande y resulta muy creíble en su retrato del mundo de la política pero es en el universo de los sentimientos y las relaciones donde todo se torna menos auténtico y aparece una y otra vez la voz de la autora en los diálogos, que acaban padeciendo monólogos de frases trascendentales y siempre con la misma voz.
También creo que una extensión un poco más reducida hubiera ayudado, sobre todo porque el final parece incluso precipitado.
Esta novela me atrajo más por su componente informático que por la parte política, la verdad es que la autora se ha documentado bien en ambos aspectos, pero lo que me falta es una historia sólida y unos personajes bien definidos, tan solo la vicepresidenta está bien retratada, aunque quizás está demasiado idealizada, o quizás es que soy demasiado cínico.
. . en fin, no me termina de cuadrar el personaje y menos pensando en la persona real en la que parece basarse, lo del abogado hacker ya si que no me cuadra, de hecho me parecen conceptos antagónicos completamente.
También he de reconocer que el estilo de la autora no me termina de entrar bien, hay cosas que me chirrían bastante como por ejemplo la costumbre de saltar entre tipos de narrador en el mismo párrafo, no se si será más o menos correcto como licencia literaria pero para mi es algo que puede causar confusión, y aunque no sea así me resulta forzado como recurso.
En general la prosa de Gopegui es clara y directa, pero hay pasajes casi siempre cuando se mete en la mente de la vicepresidenta o el abogado en los que se espesa la cosa bastante.
Los diálogos son poco fluidos, a veces da la impresión de que faltan datos, como si hablaran dos personas con una gran complicidad que se entienden con pocas palabras, cuando en muchos casos no es así.
. . supongo que es un intento de conseguir mayor dinamismo o de atribuir una profundidad de personalidad a los personajes que tendrá que poner de su cosecha el lector, en cualquier caso no me parece que sea acertado.
La trama tampoco me termina de seducir,
y el final me resulta descafeinado e intrascendente, todo lo que la autora intenta construir durante el transcurso de la novela queda en muy poco, en general no es un libro que me haya costado terminar pero tampoco me ha entretenido demasiado.